La celda de Azkaban en la que habían puesto a Michael Milton no era de las peores. El joven podía dormir sobre un catre en lugar de sobre un lecho de paja, y, acompañado por los guardiacárceles, podía ir a un baño de verdad para hacer sus necesidades en lugar de tener que utilizar un balde. Le daban tres comidas al día. Michael ya llevaba más de un día allí y lo que más molestias le causaba era el aburrimiento. No tenía libros, no podía salir de su celda más que para ir al baño y no podía conversar con nadie. Pero comparado con lo que hubiera podido ocurrirle de no haber colaborado con Albus Potter, esto era el paraíso.
Por supuesto que Michael no estaba satisfecho. Perder la libertad, si bien no era tan malo como perder la vida, no era el resultado que había esperado obtener. Había soñado con la posibilidad de ser aclamado como héroe por haber dado muerte al tirano. Quizá incluso recibir una Orden de Merlín de parte del Ministerio de la Magia… La clase de beneficios que podía traerle esa distinción a un joven hijo de muggles era enorme. Los magos de sangre pura habían estado muy agradecidos con Michael por haberlos librado de un gobierno que perjudicaba sus intereses, y habrían estado dispuesto a ofrecerle buenos puestos de trabajo, quizá su respaldo para una carrera política; al final de cuentas, Isaac Prewett había logrado escalar varios puestos en el Parlamento Mágico en relativamente poco tiempo y teniendo unos pocos años más que Michael. El futuro estaba lleno de posibilidades infinitas.
Pero ahora su futuro consistía en el tiempo que faltaba para que finalizara su sentencia, un tiempo que Michael ni siquiera conocía ya que aún no había sido juzgado por el Wizengamot y no le habían dado a conocer cuántos años pasarían hasta que recuperara la libertad. El Hacedor de Reyes le había prometido que no serían más de una década. Quizá lograra que algún amigo lo visitara y le trajera libros o naipes o cualquier otra cosa para entretenerse. Y si le llevaban suficiente dinero, tal vez lograra sobornar a algún guardia para que le permitiera visitar a Helen en su celda…
Además debía tomar en cuenta que quizá el régimen del Hacedor de Reyes no fuera tan sólido como aparentaba ser. Michael, Ernie MacMillan y Francis Fedden habían fracasado, pero otros conspiradores podrían aparecer y amenazar el dominio del hijo menor de Harry Potter sobre la Gran Bretaña mágica. Si ellos lograban triunfar, Michael y muchos otros reos encarcelados por Potter serían liberados.
De todos modos, un sabor amargo seguía persistiendo. Si tan solo hubiera matado al Hacedor de Reyes con un Avada Kedavra… Si tan solo esa maldita víbora no hubiera estado en el medio… Ahora mismo no estaría en una celda oscura esperando su juicio sino en el Ministerio, recibiendo elogios y condecoraciones junto con Helen.
Michael escuchó, de pronto, pasos en el corredor fuera de su celda. Como hacía una hora que le habían llevado su desayuno, dedujo que por fin iba a celebrarse su juicio y que venían a buscarlo. Sabiendo de antemano cuál sería el veredicto, se sintió aliviado de tener una excusa para salir de Azkaban durante algunas horas.
Esperaba que cuando la puerta se abriera los guardias habituales lo retiraran de su celda, pero en su lugar estaba un joven al que reconoció como Ash Bennett, uno de los amigos del Hacedor de Reyes, y una chica rubia que no podía ser otra que Jezebel Smith, la jefa de la División de Aurores.
—Ven con nosotros, Milton —dijo ella. Michael se levantó de su catre y salió al pasillo.
Atravesaron varios corredores más, subieron una escalera y llegaron a una pesada puerta doble de madera, que Smith y Bennett abrieron con sus varitas. Condujeron a Michael a un patio rodeado de murallas de piedra. Debido a que había pasado varios días sin ver la luz del sol, Michael estuvo casi un minuto parpadeando para acostumbrarse al cambio en la iluminación.
Cuando por fin pudo ver bien el patio, se le heló la sangre al ver a Helen Gamp tirada en el suelo, boca abajo. Había otras personas en el patio, pero Michael no les prestó atención: corrió hacia donde estaba Helen, la dio vuelta y vio que sus ojos estaban abiertos, mirando hacia la nada. Apretó su oído contra el pecho de la muchacha, intentando escuchar el latido de su corazón, pero no sintió nada. La sacudió intentando que recuperara la conciencia, pero no había forma de despertarla.
—Está muerta, Michael —dijo alguien. Cuando levantó la vista, vio frente a él a Albus Potter.
—No. ¡No! ¡Mientes! ¡Estás mintiendo, hijo de puta! ¿Qué le hiciste? —bramó Michael, con el cuerpo de Helen aún entre sus brazos.
—Una maldición llamada Avada Kedavra. Dicen que uno de sus efectos secundarios es la extinción de todas las funciones vitales. Sospecho que por eso la llaman la Maldición Asesina.
Michael se levantó y se lanzó contra Potter. No tenía varita, pero no le importaba: quería arrancarle el ojo que le quedaba, reventarle los sesos contra el piso, darle puñetazos en el rostro hasta dejarlo convertido en una pulpa. Pero antes que pudiera dar más de tres pasos, una cadena se enroscó alrededor de su tobillo derecho e hizo que cayera de bruces al suelo. Una segunda cadena se enroscó en torno a su otro tobillo. Pronto otras dos cadenas lo sujetaron de las muñecas y comenzaron a tirar de él, para hacer que quedara de pie. Por fin el joven fue alzado nuevamente del suelo y quedó con los brazos y piernas estirados.
—¡Nos juraste que nos dejarías vivir! —rugió Michael, inmovilizado pero desafiante—. ¡Nos lo prometiste! ¡Te ayudé a atrapar a los demás conspiradores, te dije todo lo que querías saber!
—Mentí —dijo Albus con calma—. ¿De verdad creíste que los iba a dejar vivir luego de lo que hicieron? Maté a decenas de personas cuya participación en este complot fue mucho menos vital que la de ustedes dos. ¿Por qué habrían de salvarse?
—¡ME DISTE TU PALABRA!
—Le di mi palabra a alguien más antes. Prometí que les iba a quitar todo, y lo estoy cumpliendo. Deberías agradecerme por mi misericordia. Originalmente planeaba utilizar una Imperius para que tú mataras a Helen a golpes. Pero preferí darle a ella una muerte más rápida, porque la verdad es que tú fuiste quien la usó para llegar a mí. Ella fue solo un arma en tus manos.
—¡VETE A LA MIERDA, POTTER! ¡Te mataré! ¡Te mataré, hijo de puta! ¡Voy a arrancarte la cara!
—Silencio —dijo Potter, y Michael perdió su voz. El Hacedor de Reyes pudo entonces continuar con su discurso—. A ti no te daré el mismo privilegio. Se me han ocurrido dos opciones. Primero, la lapidación. Si elijo esa, te mataré lanzándote varias piedras, una tras otra. Las primeras te darán en las extremidades, luego te arrojaré algunas de pequeño tamaño, pero con mucha fuerza, al rostro, para que pierdas tus ojos y dientes. Y luego te lanzaré una última piedra grande al cráneo para terminar de matarte, pero solo cuando hayas sufrido lo suficiente.
“El segundo es más simple: te quemaré vivo. Voy a decidir cuál será el método de ejecución dejándolo librado al azar. Soltaré algunos pájaros. Si vuelan hacia el norte o el sur morirás lapidado, y si vuelan hacia el este o el oeste, morirás quemado. Veamos. Avis.
Una bandada de canarios brotó de la Varita de Saúco, y emprendió su vuelo hacia las alturas. Luego de algunos segundos de indecisión, el líder de la bandada se lanzó hacia el oeste, y los demás pájaros no tardaron en seguirlo.
—Qué lástima, me ilusionaba un poco que saliera piedra y no fuego —comentó Albus—. En fin…
Apuntó su varita hacia Michael y comenzó a pronunciar la palabra del hechizo, pero súbitamente sintió una mano posarse sobre su hombro. Se dio vuelta y vio que Ash lo había detenido.
—Al —dijo el joven—, por favor, no hagas esto. Por favor, hazlo por mí. Milton tiene que morir, pero no así.
El Hacedor de Reyes pareció sorprenderse ante la intervención de su amigo, y antes que atinara a protestar, Ash continuó:
—Dale una muerte rápida, como la de Gamp, si quieres, pero no lo quemes vivo. No vale la pena. Por favor, Al. Nunca te he pedido ningún favor. Seguro puedes concederme este.
El ojo de Albus tenía una expresión indescifrable.
—Está bien, Ash —respondió luego de unos instantes de silencio—. No lo haré.
—Gracias, Al —dijo Ash—. No sabes lo…
—Tú lo harás —lo interrumpió Albus.
—¿Qué?
—Tú quemarás vivo a Milton —dijo el Hacedor de Reyes—. Tú serás quien lance el hechizo. Mata a Milton ahora, o conviértete en mi enemigo. La elección es tuya.
Ash vio que Albus hablaba en serio. Miró hacia sus otros amigos, buscando su apoyo, pero Jezzie, Agamenón, Alcyone, Livius e incluso Isaac rehuían su mirada. Volvió a mirar a la cara a su amigo, buscando despertar su conmiseración, pero no halló ni una pizca de piedad en el único ojo que le quedaba. Solo una resolución inquebrantable.
Temblando, Ash se volvió hacia Michael Milton y le apuntó con su varita. Ahora le tocó a él sentir el peso de la mano de su amigo sobre su hombro, pero Albus no buscaba detenerlo, sino darle ánimos para que cumpliera con su deber. Alentarlo para que quemara vivo a este chico de diecisiete años que había sido encadenado y amordazado mágicamente y que lo miraba con los ojos ahora repletos de lágrimas. Michael comenzó a menear frenéticamente la cabeza, en un mudo gesto de súplica.
Ash clavó su mirada en la frente de Milton para no tener que verlo a los ojos mientras lo mataba.
—Incendio.
Una llamarada salió desde su varita y envolvió el cuerpo de Michael, pero como seguía bajo efecto del Silencio, el chico no emitió el menor sonido mientras el fuego lo iba consumiendo. El único ruido lo producían las llamas al lamer su cuerpo, quemando sus ropas antes de ennegrecer su carne, y las cadenas de Milton al sacudirse. Todos los presentes guardaban un silencio sepulcral.
Pero poco más de un minuto después de iniciado el suplicio, se abrieron las puertas del patio. El mago que salió al exterior comprendió lo que estaba sucediendo de un solo vistazo.
—¡Avada Kedavra! —gritó Scorpius Malfoy, y un rayo verde salió de su varita y le dio a Milton en la espalda. El adolescente dejó de moverse, y el fuego siguió devorándolo.
Albus y Scorpius se miraron a través de las llamas de la hoguera de Michael Milton. Los ojos grises de Scor estaban cargados de repulsión y desprecio, pero el ojo de Albus no manifestaba ninguna emoción. Scorpius escupió al suelo, le dio la espalda a su amigo y volvió a entrar a la prisión.
Wow buen capitulo martin muchas gracias por seguir escribiendo, soy seguidor desde el 2009 y por un momento pense k tal ves no veria el final, que gusto haberme equivocado saludos
Esperemos que continúes estando equivocado, David 😀
Saludos!
Parece que el perder la misericordia será lo que haga que Albus sea traicionado por alguien cercano a él.
Excelente capítulo Martín, te deseo un buen 2015 😀
Ciertamente Scor está muy enfadado.
Saludos, y feliz año para ti también 🙂
Uhh…
Siento que Albus está perdiendo definitivamente el rumbo. Ahora si justificaría el asesinato por parte de… quién sea que haya asesinado a Albus Potter.
No lo niego, ha llegado demasiado lejos. Ya veremos qué pasa.
Saludos!
Hola Martín. Me da muchísimo gusto que retomaras la historia y por los últimos capítulos que has subido, veo que la historia se volverá más intensa de lo que ya era. Continúa con la historia ya que es intenso e interesante ver como se sigue desenvolviendo la trama.
Slds.
Me alegra que te guste, y estás en lo cierto, las cosas se volverán mucho más fuertes ahora.
Saludos!
Me recordó un poco a la muerte silenciosa que sufrió Nicholas Crabbe, a mano de uno de los discípulos de Albus. Al parecer no solo perdió un ojo, sino también un par de tornillos ^^
Es digno, sin duda de ser el primer capítulo del 2015. Estoy inquieto por saber cómo seguirá. Feliz año, Martín 🙂
Yo creo que Al ya estaba inestable antes del ataque, por lo de Valerie y Annie. Solo necesitaba una excusa para descargar toda la violencia y el odio que sentía, y Michael se la proporcionó. Pero cada cual puede interpretar al personaje como prefiera 😀
Saludos y feliz año para ti también
Scor se acaba de volver mi personaje favorito. Parece ser el único dentro del grupo de amigos de Albus que aún pone por delante sus principios que la ambición o el miedo.
Yo voto por ponerle de próximo Ministro XD
Ya veremos cómo responde Al a este desafío.
Saludos!
un excelente capitulo martin creo que aqui es donde scorpius abandona a albus pero no pelea en su contra. solo se hara a un lado asi que no se convierte en su enemigo solo dejaran de ser amigos.
saludos y epseremos que el proximo capitulo sea pronto y sigas con esta excelente historia.
feliz año nuevo
Es muy difícil que una amistad pueda sobrevivir luego de esto 😀
Saludos!
Lo admito, el hecho de que Al le prometa «vida y seguridad (hasta menos de 10 años de reclusión)» a Milton si este lo ayudaba me hizo sentir cierta impotencia. ¿Cómo era posible que Al perdonara a alguien que lo dañó de tal modo? Pero en fin, le creí ya que Al es de las personas que cumplen sus promesas. Había aceptado, muy a mi pesar, que Al deje a Milton sin un castigo ejemplar. Pero…pero…pero…….
Pero más asombro (y pena) me causó el que Al no cumpla su promesa hacia Milton :O… Indudablemente, la decadencia del Hacedor ha comenzado y su cordura está siendo puesta en duda por los miembros su ka-tet. Se avecina la caída del Emperador de los Helados :/…
P.D.: Feliz año Martín!!! 😀
Vaya, había olvidado lo del emperador de los helados, qué gran poema.
Sí, que Albus rompa su promesa a Michael en vez de «torcerla» como antes es un big deal
Saludos y feliz año 🙂
Wow… esto esta mas que genial ufff, ese final…
Aunque ese continuará da miedo 😮
Grande Martin, genio!
jajaja
Muchas gracias, Andrés
Saludos!
¿Y ese arrebato de Scorpius?. Esperaba que Ash se negara a quemar vivo a Milton, ya que Albus es cada vez más perverso y sanguinario.
Creo que Scorpius, junto con Isaac y Livius (y Valerie) siempre fue el que menos miedo le tuvo a Al. Isaac y Livius no le temen porque saben que son muy útiles para él, y Scor porque es el primer chico del que se hizo amigo en el colegio y tienen una relación más estrecha.
Oye Martin, sabes cuantos capítulos quedan aproximadamente de fanfic?muchas gracias por esta tremenda historia
Lamento decirte que no tengo la menor idea, Marcelo 😀
Martin!!! FELIZ 2015! :D…quien lo diría no…años han pasado ya…y demasiado tiempo desde mis últimos comentarios….lo que no significa que haya dejado de estar al dia con la lectura 🙂
Me dio lastima el final de Milton, creo que, con su ingenio y determinación ( a pesar de su sobreestima y falta de recursos reales para competir con Al) era la promesa de un enemigo interesante para Albus, alguien que quizás pudo tener mas protagonismo que el que tuvo, me parece que una promesa frustrada, un árbol cortado antes de empezar a crecer…como muchas veces pasa con las mentes brillantes que mueren jóvenes (o sufren algún percance que los descoloca de su eje) creo que este personaje nos encandilo con sus pocas y misteriosas apariciones y esperaba de él algo mas…aunque quitarle un ojo a Al no es nada que despreciar para la historia…
lo del ojo de Al me hizo acordar al episodio Made To Suffer de The Walking Dead cuando el gobernador pierde su ojo derecho…y como esto (a pesar que el personaje ya estaba mentalmente desviado) lo empuja hasta fuera de todos los limites tolerables «por la supervivencia» (junto con las otras perdidas que tuvo en ese episodio)…
cuando Al habla con Ag me lo imagine como David Morrissey al final del capitulo cuando le habla a los pueblerinos de Woodbury, ese renacer con mas fuerza, con aun mas decisión, con sed de venganza y con aun menos cordura….listo para dar rienda suelta a su sadismo y hacerles pagar a todos por su perdida…Al esta pensando lo mismo….a él no le molesta tanto (en mi opinión) perder su ojo….lo que le molesta, lo que lo hiere, es haber perdido el control…el aparente control de Hogwarts, el control de sus alumnos, el control de la situación…alguien lo desafía, a él, en su propio terreno, en el lugar que el siente (en su narcisismo) que él es importante por él mismo, por su carisma, por lo que enseña, por como lo enseña, y no solo por el poder que denota…porque Al, al igual que todo ser humano, en el fondo busca reconciliación, reconocimiento (ser amado, admirado, querido….y solo en ultima instancia temido)…para Albus todas estas instancias con el golpe de Milton han fallado, ahora solo le queda ser temido…y él les dará a todos muy buenas razones para hacerlo…
Con respecto a este capitulo en particular, el final, fue para mi perfecto….ya había notado que cuando Ash miraba hacia todos Scorpius no estaba y pensé, «que raro, es su prisión, es quien mas debiera estar ahí» y su entrada, participación y salida asi sin mas, sin mas explicaciones, me pareció lo justo y necesario…en ese simple acto estuvo todo lo que había por decir «este es mi limite Albus, yo no lo cruzo»
me imagino que esta escena ha estado precedida por algún encuentro entre estos viejos amigos, en el que Al llegaba con todo su séquito a Azcaban a contarle a Scorpius lo que planeaban hacer y este (para sorpresa de Al) negándose a que lo realizaron, supongo que Scor no comulgaría con la idea que torturasen así al chico, y menos ser responsable de ello (en la prisión de la que él es responsable, la tortura de Milton también sería su responsabilidad) y si bien Malfoy nunca a ha demostrado ser un hombre moralmente muy complejo, si puede decirse que es un personaje muy alejado de los gustos de su amigo por la tortura y la sangre ajena.
ya desde hace un tiempo largo (incluso iba a comentarlo en el capitulo anterior, que al final no comente) estoy convencida que Scropius acabar siendo una pieza clave para la caída de Albus, no creo que sea premeditado, ni adrede, si creo que comenzaran a ver diferencia, graves e irreconciliables entre estos dos amigos algo que aquí puede comenzar a verse) y que algo pasara que hara un quiebra y al momento final Scorp tendrá que decidir un mundo con o sin Albus Potter, y para ese momento estará Rose que le ayudara a decidirse (no creo que él le hiciera daño a quien es su mejor amigo, pero si que su relación es tan profunda e importante para ambos que la mera omisión de algo por parte de Scorpius podría ser fatal para Al)
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bien, ya cerrando este ENOOOORME comentario 😛 (pretendía como siempre ser breve y falle estrepitosamente), dira que estoy mas que feliz de que vuelvas a escribir y que jamas, jamas de los jamas, asi tarde 10 años mas (esperemos que no :P) en terminarlo, te leeré hasta el final, porque este finc es parte ya parte de mi mundo Potterico 🙂
pd: Albus como la mente brillante que es sabrá que, a pesar de todo, esta sería una enorme oportunidad para conseguirse un ojo mágico. Un Albus que vea a sus espaldas y a través de objetos sólidos es un Albus que inspiraría terror hasta en sus mejores aliados. 😀
1. Ahora nadie me lo va a creer, pero yo planeé lo del ojo de Albus años atrás, y cuando en The Walking Dead dejaron tuerto al Gobernador, supe que iban a pensar que lo mío era un homenaje (por no decir plagio). En fin…
2. Albus no discutió con Scorpius lo que iba a pasar con Michael, simplemente le dijo lo que Michael y Helen habían hecho y le pidió que los pusiera en una de sus celdas. Luego de ocuparse del Parlamento y otros asuntos, él fue a ejecutar a Michael sin molestarse en pedir permiso o informar a Scor. Nadie va a hacerle preguntas al Hacedor de Reyes, ni siquiera (o especialmente) en Azkaban.
3. Muchas gracias por dejar un comentario tan largo, es un placer leerte como siempre 🙂 Besos!
A mi cada vez me interesa más saber, no quienes de sus amigo se van a poner en contra de Albus, sino quien le seguirá siendo leal.
Porque después de lo ocurrido en los dos últimos capítulos, y los sucesos que estén por venir, que pacíficos no tienen mucha pinta de tener, ¿podran los amigos del Hacedor seguir utilizando la excusa del miedo?. ¿Y si ahora Albus ataca a Scorpius, o a su propia familia?.
Tienen que empezar a darse cuenta que su amigo, a ese que tanto querían, murió hace mucho. Y ahora solo queda el mosntruo.
Martín una pregunta que me imagino que no puedes responder, pero que aún asi tengo que hacer. ¿Harry Potter morirá a lo largo de la guerra con su hijo?.
Ya veremos como responde Al al desafío de Scor, y las reacciones de otros de sus amigos.
Respecto a tu pregunta, te responderé cuando GRRM me diga si R+L=J 😀
Saludos, y muchas gracias por tu comentario 🙂
Pues con el ritmo que tiene el viejito para publicar Vientos, me parece a mi que sabremos el destino de Harry cuando mis biznietos tengan hijos. XD
Confío en terminar el fanfic antes que GRRM termine CdHyF. 7 años de retraso contra casi 19… Me siento virtuoso en comparación, ja ja.
P.S. ¡NO!. ¡POR FAVOR!.
No tardaré 19 años en acabar el fanfic, tengo la esperanza de terminarlo en menos de un año.
¡Michael! Por extraña razón creía lo mismo que otros lectores e imagine que él seria quien pusiera un fin al Hacedor… pero no. Al falto a su palabra y no sé porque pero lo justifico e imaginaba que haría algo así después de todo ha hecho cosas peores a quienes le han quitado menos (Definitivamente de una manera exagerada y dolorosa, esta no podía ser la excepción).
Entonces quiere decir que Scorpius y Albus ya tendrán su fin (lo que me hace recordar que en el capítulo de dos supervivientes Scorpius tiene una cicatriz) no se tal vez Al se moleste por lo ocurrido y tenga una pelea con ¿Scorpius? Aunque no lo sé porque dice que nunca estuvo contra él… así que, ya no se que esperar.
Entre otras cosas me alegra que hayas regresado y mas con un montón de capítulos de los cuales me puse al día, menos mal que muchos (o eso imagino) nos equivocamos adelantando que nunca volverías a darle fin apenas hace dos años que lo encontré y es genial ahora imagino todo lo que tuvieron que esperar los que llevan mucho tiempo leyéndolo y es asombroso que causes tantas emociones con un solo capitulo. ¡Eres un genio!
¡Saludos Martin que tengas un año excelente!
Todo lo que hace el Hacedor de Reyes puede justificarse… desde cierto punto de vista. Cada lector puede formarse su juicio sobre él, yo solo expongo sus acciones y algunas de sus motivaciones 😀
Saludos y muchas gracias por comentar
Muy buen capitulo solo espero que no tengamos que esperar un año para disfrutar del proximo
Te alegrará saber que ya tengo escrito el siguiente 🙂
Saludos!
Oye, ahorita pensándolo en retrospectiva, y recordando que los dos capítulos anteriores tenían nombres en gaélico, me extrañó que no pusieses a este Cha Mairbhe, y ejecutaras un asesinato más sangriento para Michael Milton, de manos de su novia convertida en Inferius. Hubiese sido… no sé, artístico? jajaja 😀 salu2.
Originalmente había pensado en que Albus directamente lapidara a Michael, con una meticulosa descripción de cómo cada piedra, arrojada mágicamente, impactaba sobre cada parte de su cuerpo. Pero luego pensé que iba a quedar demasiado psicópata 😛
Jajaja, tu crees? A mí me hubiese parecido Chévere, o hasta Divertido ^^. Más psicópata era lo de la Inferius, y si de paso hubiese matado a «la materia prima» del hechizo frente a los ojos de Milton, sería algo así como más desgarrador jejeje.
We really need help 😀
Hola Martín, saludes, es la primera vez que comento aunque te Leo desde 2010; me parece que deberías seguir con la Relacion Ash y James es de las mejores y le daría un toque interesante, Amo tu historia tu forma de escribir descarnada y sincera que expresa la historia de forma completa y entretejida aunque simple de entender a la vez. Tu historia nos lleva a ver el mundo Potter algo mas real como debe ser y ya no como cuentos para niños pues todos los que leimos a Harry ya somos adultos. Insisto La pareja Ash James porfa escribe mucho sobre ellos. saludes
Hola, Luis. Me alegra que te haya gustado lo de Ash y James. Ya veremos si logran retomarlo…
Saludos!
Ok. ¡ME ENGAÑÓ POR COMPLETO!. jajajajajaja Estaba tan sorprendida por la actitud tan ecuánime de Albus Severus al encarcelar a este pendejo con tantas promesas (BY THE WAY… DESPUÉS DE SABER SUS MOTIVACIONES ME CAE MÁS MAL EL CONDENADO…) que de plano pensé que podría dejarlo ser…
Pero no lo olvidaré más… 😀
Otra cosa. Después de las últimas declaraciones de JKR acerca de los Malfoy este es todo un bálsamo a mi maltrecho corazón… ¡Gracias!. :*
Esa era la idea. Albus siempre se las ha arreglado para cumplir con sus promesas «en la letra» aunque no «en el espíritu» (por ejemplo, nombró a Dawlish ministro antes de matarlo). Ahora ni se molesta 😀
¿Prometer o cumplir en la letra?.
No se molesta en cumplir sus promesas a medias, le prometió a Milton perdonarle la vida y cuando él se lo reprochó, se limitó a decir «Mentí». Me parece que esa fue una de las muchas líneas que atravesó en su descenso hacia el mal.
Ok. Me engañaste, fui muy ingenua pero ahora realmente me pregunto cómo pude… «—Mentí —dijo Albus con calma—. ¿De verdad creíste que los iba a dejar vivir luego de lo que hicieron? Maté a decenas de personas cuya participación en este complot fue mucho menos vital que la de ustedes dos. ¿Por qué habrían de salvarse…»
Albus Severus ha sido siempre consecuente, es de los personajes que «no decepcionan porque actúan exactamente como se espera de ellos», como diria la bruja……
No???. 😀