Servilia Crouch procedió luego a hablarles del Torneo de los Tres Magos, que ese año se celebraría en Hogwarts.
-Como saben, cuando el Torneo se celebró en nuestro colegio en 2003, la directora McGonagall hizo construir dos torres extra en el castillo, para alojar a los alumnos de séptimo año de Beauxbatons y Durmstrang. Las torres serán ahora reabiertas, y los estudiantes de esas escuelas, que llegarán aquí en octubre, residirán en ellas y continuarán con sus clases normalmente en nuestro colegio durante el año.
“El Cáliz de Fuego será colocado en el vestíbulo cuando los alumnos de Beauxbatons y Durmstrang lleguen; estará custodiado por dos Aurores y por una línea que impide mágicamente que nadie con menos de diecisiete años la cruce, de modo que les aconsejo a los alumnos más jóvenes no intentar hacer trampas.
“Lo que les dije en cuanto a los profesores visitantes lo repito en cuanto a los alumnos visitantes: deben ser tratados con hospitalidad y cortesía. El objetivo del Torneo es fomentar los lazos de amistad entre magos y brujas de distintas nacionalidades, y espero que se cumpla -concluyó, muy seria. Después de estar en silencio unos momentos, la directora dijo:- Bueno, ahora pueden irse a sus camas. Que los alumnos de primero sigan a los prefectos de sus nuevas Casas.
***
Las clases se reanudaron al ritmo habitual. Albus debió esperar hasta el miércoles para encontrarse por fin con la nueva profesora.
-Como ustedes deben saber -dijo la profesora De Bricassart en un inglés sorprendentemente claro tras saludarlos y tomar asiento en su escritorio-, el programa de Defensa Contra las Artes Oscuras está dividido en cuatro grandes segmentos. El primero, que consiste en enseñarles hechizos defensivos básicos como el Protego o el Expelliarmus, se da en primero y en segundo. El segundo, que consiste en el estudio de criaturas mágicas peligrosas y de los medios para combatirlas, se da en tercer año. El tercero, que se ocupa del estudio de la magia oscura y métodos específicos para enfrentarlas, se da en cuarto y quinto. El cuarto, que se ocupa de la magia no verbal, de la Oclumancia y la Legeremancia, se da en sexto y séptimo.
“No obstante, parece que el profesor MacMillan, por lo que dicen sus notas, les ha enseñado todos los hechizos defensivos de primero y de segundo el año pasado. No es que quiera dudar de su palabra, pero creo que sería bueno hacer un repaso de los hechizos que conocen. Empecemos con el Expelliarmus, ¿de acuerdo?
Durante el resto de la clase, los chicos y chicas de Slytherin y Ravenclaw estuvieron desarmándose, paralizándose, Aturdiéndose (para esto la profesora, que insistía en que sus alumnos la llamasen por su nombre de pila, tuvo que materializar varios colchones), conjurando encantamientos escudo, etcétera. Corisande parecía complacida por los progresos de sus nuevos estudiantes.
-Bueno, bueno -dijo, con una amplia sonrisa-, parece que ustedes son un grupo extraordinariamente avanzado. Eso habla bien del profesor MacMillan, pero mucho mejor de ustedes. Los felicito.
Los alumnos sonrieron tímidamente. No estaban acostumbrados a recibir tantas alabanzas de MacMillan, pese a que era un profesor amable. Rose levantó la mano.
-Profesora…
-Llámame Corisande, Rose.
-Lo siento. Corisande, ¿qué vamos a estudiar éste año entonces?
-Bueno, pues tendremos que comenzar a dar contenidos del tercer año. No puedo tenerlos todos estos meses sin hacer nada, o practicando una y otra vez los mismos hechizos, lo cual es más o menos lo mismo, ¿verdad?
Los chicos comenzaron a murmurar entre sí, emocionados. Corisande los interrumpió.
-Ahora escúchenme. La próxima clase comenzaremos con el primer animal mágico que figura en el programa de tercero, el boggart. ¿Alguien sabe qué es?
Albus logró levantar la mano antes que Rose.
-¿Sí, Albus?
-Es una criatura que se convierte en lo que más tenemos.
-Bien, cinco puntos para Slytherin. El boggart, efectivamente, se convierte en la cosa a la que más miedo le tenemos. No obstante, no es capaz de dañar físicamente a un ser humano, aunque no lo parezca. Sus metamorfosis son de hecho un mecanismo de defensa para lograr que huyamos. Por más que el boggart se convierta en los monstruos más peligrosos, lo único que hará en la mayoría de los casos es espantarlos. En muy pocas ocasiones los boggart atacan a sus víctimas. Eso es una cosa que quiero que tengan en cuenta para no preocuparse.
“En segundo lugar, los boggart son muy poderosos en enfrentamientos con un humano, pero su eficacia no es tanta cuando se enfrenta a varios, pues la cosa a la que uno le tiene miedo no asusta a los demás, y no es capaz de metamorfosearse simultáneamente en lo que todos temen. El boggart es combatido mediante el hechizo Riddikulus, en el cual el mago convierte al boggart en una versión cómica de aquello que está representando.
“Generalmente el profesor MacMillan les da una ventaja y una desventaja cuando lidian con los boggart. La ventaja es que lo hacen en grupo. La desventaja es que los enfrenta al boggart en la primera clase, de modo que los chicos no tienen tiempo de prepararse mentalmente para la lucha.
“En este caso, yo quiero invertir los términos. Tendrán una semana para prepararse para el boggart, durante la cual podrán pensar en qué podría convertirse éste y en qué lo convertirán ustedes, pero tendrán que vérselas con él solos. Por supuesto -aclaró-, yo estaré en el salón con ustedes para asegurarme de que las cosas no se salgan de control.
En ese momento, la campana sonó y Corisande volvió a sonreírles.
-Bueno, la clase ha terminado. Nos veremos aquí el miércoles que viene. Y recuerden: piensen en cuál es la cosa a la que más miedo le tienen y en qué la metamorfosearán.
***
Durante los días siguientes el tema predominante entre los compañeros de clase de Albus fue el inminente encuentro con el boggart que Corisande les tenía preparados. Todos hablaban sobre cuál era su mayor miedo y cómo se enfrentarían a él, y competían por las formas más rebuscadas de ridiculizarlo.
Albus no participaba de esas charlas. Desde que Corisande les hiciese aquel excitante anuncio, no podía dejar de preguntarse qué forma adoptaría el boggart frente a él. ¿Sería algún profesor? No, pues si bien unos cuantos, como Firenze o MacMillan, eran bastante estrictos y no convenía meterse en problemas con ellos, ninguno le inspiraba auténtico miedo sino más bien precaución. Lo mismo le inspiraba Servilia Crouch, a la que sólo veía en los banquetes y de vez en cuando en los pasillos. Tampoco le daban miedo sus padres, o su hermano mayor, o cualquier otro adulto que conociese.
¿Sería algún monstruo? Pero mientras más repasaba Albus los monstruos que conocía, menos creía que pudiesen asustarlo. Vampiros, hombres lobo, Dementores, banshees, momias, acromántulas, gigantes… Había leído sobre ellos y había visto imágenes, pero no podía temerles sabiendo, por ejemplo, que los gigantes y los vampiros habían sido expulsados de Gran Bretaña veinte años antes, o que, gracias a una política conciliadora seguida por parte del Ministerio después de la guerra, la mayoría de los hombres lobo tomaba religiosamente la poción matalobos y no era por lo tanto capaz de atacar a ningún humano durante sus transformaciones, o que las acromántulas jamás habían salido de los límites del Bosque Prohibido después de la batalla final. Cada vez que pensaba en un monstruo, su mente automáticamente le daba motivos por los cuales era ilógico temerle.
Hay que entender que otro factor tenía peso en la psique del niño: el hecho de que él, a diferencia de su padre, que se enfrentó al boggart habiendo visto ya a un Dementor, jamás hubiese visto en persona a ninguno de esos monstruos. No se trataba de que Albus fuese absolutamente carente de miedo, sino que había tenido una vida mucho más segura que su padre.
***
Finalmente llegó el miércoles y Albus y sus compañeros se encaminaron al salón de Defensa Contra las Artes Oscuras. Al llegar se encontraron a Corisande esperándolos en la puerta.
-Buenos días, chicos. Espero que se hayan preparado para lo de hoy.
Los niños asintieron, muy serios. Si bien durante la semana se habían jactado de lo que le harían al boggart, ahora que el momento de llevar sus planes a la práctica había llegado, estaban nerviosos.
-Entrarán conmigo al salón en orden alfabético. ¿Donald Ackerley? -un chico gordito de Ravenclaw levantó la mano- Ven conmigo.
Así, los compañeros de Albus fueron entrando al salón acompañados de Corisande. Todos salían contentos, hablando entusiasmados sobre lo que se habían encontrado. Livius Black, naturalmente, tardó más tiempo que los otros porque tuvo que hacer el Riddikulus no verbalmente. Salió con aspecto cansado.
Irene entró al salón y tardó poco en salir. El boggart, contó un poco avergonzada, había adoptado la forma de su padre reprendiéndola por unas malas notas, pero ella había logrado convertirlo en un Ernie MacMillan que la felicitaba orgullosamente por su desempeño en las clases (dijo que había utilizado un recuerdo real para contrarrestar la fantasía del boggart).
Scorpius entró a continuación. Hubo varios gritos en el interior del salón, seguidos por un sonido estruendoso que nadie supo identificar, y el chico tardó un buen rato en abandonarlo, pálido y todavía un poco asustado.
-¡Se convirtió en un gigante! ¡Corisande tuvo que agrandar el techo del salón para que no lo rompiera!
-¿Y lograste vencerlo? -preguntó Albus.
-Sí, por suerte -y luego añadió en voz más baja-. Hice que se tirase un pedo.
Albus estalló en carcajadas, y así pudo esperar que los cuatro alumnos cuyos apellidos iban antes que el suyo entrasen con bastante tranquilidad. Pero cuando Portia Nott salió y Corisande lo llamó a él, sus tripas se retorcieron.
La profesora le apoyó tranquilizadoramente la mano en el hombro mientras le abría la puerta. Albus se encontró con que el techo del salón seguía grande -había alcanzado el tamaño del de una catedral-, y eso lo distrajo al principio del boggart, ubicado cerca de un placard abierto en el centro del salón.
Todavía tenía la forma que había adoptado frente a Portia, un tritón que gruñía ferozmente y amenazaba con su tridente a Albus. El chico se acercó un par de pasos a él, pensando una y otra vez “Esto no es real, esto no es real…” Cuando estuvo a la distancia justa, la forma del boggart cambió.
Al principio, pareció como si su cuerpo estuviese hecho de un material maleable; a Albus le recordó al T1000 de la película Terminator 2. Pero al cabo de unos instantes, la cosa informe que era el boggart se materializó no en uno sino en dos cuerpos.
Uno de ellos era Albus, y el otro era Scorpius.
Albus se quedó pasmado e inmóvil, y la profesora, que estaba cerca de la puerta observando atentamente el encuentro, también quedó paralizada por la sorpresa. No obstante, el boggart-Albus y el boggart-Scorpius no hicieron ningún gesto de amenaza hacia el verdadero Albus. Estaban mirándose uno al otro a los ojos y sonriendo. Luego, cada uno puso sus brazos en los hombros del otro y se fundieron en un fuerte abrazo.
Durante unos segundos, el boggart-Scorpius se limitó a acariciarle y palmearle cariñosamente los hombros al boggart-Albus. Pero finalmente, y sin que ni Albus ni Corisande supiesen de dónde la había sacado, levantó un puñal con la mano derecha y lo clavó con saña en la espalda del falso Albus.
El boggart-Albus soltó un grito desgarrador, y su voz era idéntica a la del verdadero. Eso no conmovió en lo más mínimo al falso Scorpius, que continuó apuñalando una y otra vez la espalda del falso Albus hasta que éste cayó al suelo. El boggart-Albus intentó arrastrarse para huir de su atacante, pero el boggart-Scorpius lo sujetó y lo puso boca arriba, tras lo cual le propinó dos puñetazos brutales en el rostro y comenzó a apuñalarlo en el pecho. La sangre se extendía ahora en un charco cada vez mayor en torno a las dos figuras y llegó a tocar los pies del verdadero Albus, que observaba la escena con horror.
Corisande finalmente reaccionó.
-¡Albus, utiliza el Riddikulus!
El chico levantó, temblando la varita y dijo:
-¡Ri… Riddikulus!
El boggart-Scorpius se transformó en Rose Weasley, pero ésta continuó con la sangrienta faena, clavándole el puñal en el estómago al falso Albus.
-¡Riddikulus!
Pero el boggart sólo se transformó en Livius Black, y ahora comenzó a destripar a Albus. Con lágrimas en los ojos, el auténtico Albus gritó con fuerza:
-¡RIDDIKULUS!
No obstante, el boggart no dejó de ofrecer ese espectáculo dantesco, sino que sólo cambió la forma del atacante a Harry Potter. El falso Harry levantó una vez más el cuchillo y lo descargó una y otra vez sobre el cuello de su hijo, intentando aparentemente decapitarlo.
Finalmente, Corisande corrió hacia donde estaba Albus y lo empujó hacia atrás, poniéndose ella misma frente al boggart. Éste cambió hasta convertirse en una veela en su estado de furia (o sea, con cabeza de pájaro y alas escamosas), pero cuando Corisande dijo “Riddikulus”, éste volvió a metamorfosearse, esta vez en una veela con un enorme grano en la frente.
Dándole la espalda, Corisande se volvió hacia Albus, que estaba sollozando en el suelo. La profesora se inclinó y lo ayudó gentilmente a levantarse.
-Toma -le dijo, y materializó un pañuelo con el que Albus se limpió la cara lo mejor que pudo-. Vámonos de aquí.
Apoyándole protectoramente la mano en el hombro para que no se tropezase, Corisande llevó a Albus al exterior del salón. Los chicos que estaban esperando los miraron con extrañeza, pero ella no tardó en hacerse cargo de la situación.
-La clase se suspende -le dijo a Isaac Prewett, Valerie Rosier, Rose Weasley y otros alumnos que esperaban su turno de entrar-. Ustedes se enfrentarán al boggart la semana que viene, ¿comprendido?
Los chicos en otras circunstancias hubiesen protestado, pero la expresión del rostro de Corisande era mortalmente seria y no se animaron a contradecirla.
-Regresen a sus ocupaciones -le dijo al resto de los niños-, yo llevaré a Albus a su dormitorio. Scorpius, acompáñanos.
Desconcertado, Scorpius fue con Corisande y Albus, explicándole a la profesora cómo se llegaba a la sala común de Slytherin y al dormitorio que compartía con su amigo y los demás chicos de segundo. Una vez allí, Corisande le dijo a Albus que se pusiera el pijama y se acostara a dormir.
-Aquí tienes -le dijo, al tiempo que sacaba una botellita del bolsillo y se la daba-. Acuéstate y tómatela toda. No te preocupes, hablaré con la profesora Jones y le explicaré que no puedes venir a su clase. Cuando hayas despertado, vuelve al salón, quiero hablar contigo a solas; ya me habré llevado el boggart para ese entonces.
***
Al cabo de casi tres horas, un Albus Potter sumido en los más negros pensamientos y escondido tras la Capa de Invisibilidad -aquella semana le tocaba a él usarla, y no quería tener que hablar con ninguno de sus compañeros en la sala común, por lo que se la puso antes de salir del dormitorio- golpeó la puerta del salón de Defensa Contra las Artes Oscuras.
-Hola, Albus, pasa -dijo Corisande mientras le abría la puerta. Albus entró nuevamente al salón, cuyo techo había recuperado sus dimensiones normales. El placard donde había estado escondido el boggart había sido retirado. Albus esperaba que Corisande se sentase en el escritorio, pero lo sorprendió tomando asiento en uno de los pupitres e invitándolo a hacer lo mismo en el de al lado. Aparentemente no quería incomodarlo hablando con él con un escritorio de por medio.
-Escucha, Albus, en primer lugar quiero disculparme. Está claro que era demasiado pronto para que ustedes se enfrentasen a un boggart.
-Querrá decir para que yo me enfrentase a un boggart. Mis compañeros no tuvieron ningún problema.
-Es cierto. Pero lo que te mostró el boggart es algo ante lo que muchos magos adultos también serían incapaces de defenderse.
-¿Mi… mi muerte? ¿Le tengo miedo a la muerte?
-No, Albus. He visto a muchos que le tenían miedo a la muerte enfrentarse a los boggarts, y lo que ellos ven es su propio cadáver, no a alguien asesinándolos. Y no a sus amigos y familiares asesinándolos, por cierto.
-¿Entonces es a eso lo que le tengo miedo? ¿A que ellos me maten?
-No creo. Me parece que debemos hilar más fino, Albus. Piensa en lo que te hizo el falso Scorpius Malfoy: te apuñaló por la espalda. Todas las demás heridas que te hacía él y el falso Livius y la falsa Rose y tu falso padre no eran sino la repetición de esa primera herida, de ese primer ataque.
“¿Sabes lo que pienso, Albus? Creo que a lo que realmente le tienes miedo es a la traición.
-¿La traición? Pero yo jamás he sospechado que ellos quieran traicionarme, jamás había pensado en ello en mi vida…
-No, no concientemente. Pero inconcientemente tú temes que te traicionen. No tu padre, Scorpius, Livius y Rose en particular, sino todos tus amigos y familiares, tu gente de confianza. Ese es en realidad tu mayor temor.
Albus guardó silencio. Lo que Corisande le decía tenía cada vez mayor sentido. Cuando el boggart atacó a su falso yo, lo que realmente lo había horrorizado no era la manera atroz en que la criatura lo había “asesinado”, sino el hecho de que hubiese adoptado la forma de sus seres queridos. La expresión de maldad y odio en los rostros de Scorpius o de Rose había sido para él mucho peor que ver su propia sangre derramada por el piso o sus intestinos arrancados de su vientre o su cuello cortado hasta casi separar la cabeza de él.
-Escúchame bien, Albus -dijo Corisande, sacándolo por un momento de sus reflexiones-. Lo que el boggart te mostró no es real. No debes creer eso ni por un momento. El boggart no hace más que sacar lo peor que hay en ti y emplearlo en tu contra. Lo que viste hoy no es más que una ilusión, ¿entendiste? Y debes pensar en otra ilusión más fuerte para contrarrestarla. El próximo miércoles, si te sientes preparado, volverás a vértelas con el boggart.
Albus se puso de pie y caminó hacia la puerta. Con la mano en el picaporte, se volvió hacia Corisande y dijo, en voz muy baja:
-¿Va a contarle a alguien lo que pasó con el boggart?
-No si tú no quieres, Albus.
-Prefiero que nadie lo sepa -dijo él rápidamente.
-Entonces te prometo que nadie lo sabrá por mí.
***
Corisande había quedado exhausta por los acontecimientos de aquel día. Nunca hubiese imaginado que algo tan sencillo como un boggart pudiese generar tantos problemas, pero tampoco habría podido imaginar que Albus Potter le tuviese miedo a algo tan abstracto como la traición, y que el boggart la representase de un modo tan horripilante.
La joven profesora decidió que haría lo mismo que le había hecho hacer a Albus y tomaría una siesta. Pero desgraciadamente sus superiores tenían otros planes para ella. En el pasillo se encontró con Randy Creevey, un alumno de segundo de Gryffindor, que le entregó una nota de Servilia Crouch pidiéndole verla en su oficina.
Resignada, Corisande se encaminó hacia el despacho de Crouch y tras darle la contraseña a la gárgola, subió las escaleras y golpeó la puerta.
-Adelante -dijo Crouch desde adentro.
La profesora entró a la oficina y se sorprendió al encontrar a la directora vestida con ropas muggles muy elegantes. Al igual que su hermano Barty, Servilia Crouch era muy buena en mimetizarse entre los muggles. Crouch advirtió la reacción de Corisande y le explicó:
-Voy a asistir a la ópera esta noche, Corisande. ¿Alguna vez has ido?
-No. Sinceramente, en mi familia no tenemos mucho contacto con el mundo muggle.
-Uno de los rasgos más destacados de los Crouch es que nos interesa mucho la vida de los muggles. Somos de sangre pura, pero no despreciamos a los muggles como otras familias mágicas.
“Bueno, Corisande, imagino que te preguntarás por qué te he llamado aquí. Verás, el año pasado el ministro de la Magia me informó que había habido algunas amenazas contra los hijos de Harry Potter. Afortunadamente, por el momento las amenazas no han pasado de ser eso. No obstante, desde entonces yo solicito a los profesores que me informen regularmente sobre James, Albus y ahora Lily Potter. Mientras más sepamos sobre ellos, mejor podremos protegerlos, ¿cierto?
-Cierto -dijo Corisande con seriedad-. Bien, Servilia, por lo que los he llegado a conocer, diría que los tres son chicos normales. James es un alborotador, pero carece de auténtica malicia y es a la vez un gran estudiante. Lily es un poco más tranquila, aunque opino que con el tiempo terminará pareciéndose a James.
-¿Y Albus?
-Albus Potter me parece un chico muy inteligente. No es travieso como su hermano mayor, y es muy leal a sus amigos, por lo que los he visto interactuar en mis clases.
-Tengo entendido que hoy se enfrentó por primera vez a un boggart, ¿cierto?
-Sí. Ya habíamos discutido sobre lo avanzado que estaba el grupo de Albus y usted estuvo de acuerdo en que les diese contenidos de tercer año.
-Y sigo estando de acuerdo. Pero querría saber qué forma adoptó el boggart frente a él.
Corisande se quedó callada por unos momentos, y finalmente respondió, con el tono más educado que pudo:
-No puedo decirte, Servilia. Le prometí a Albus que no le diría a nadie.
Crouch entrecerró los ojos y la miró fijamente.
-Corisande, yo no te estoy haciendo esa pregunta por simple curiosidad. No soy una persona chismosa. Pero necesito conocer lo mejor que pueda a Albus Severus Potter, lo mismo que a sus hermanos, para velar mejor por su seguridad. Y saber a qué le tiene más miedo el señor Potter es algo clave en ese sentido, pues podría servir para que sus enemigos, o más bien los enemigos de su padre -que tú sabes bien que no son pocos- lo empleen contra él.
-Entiendo lo que dice, directora, pero no puedo romper mi palabra. No obstante, quiero asegurarle que es muy difícil que nadie adivine por su cuenta a qué le tiene miedo Albus. Y aún si lo averiguasen, sería complejo utilizarlo en su contra.
Servilia Crouch guardó silencio y volvió a observar escrutadoramente a la profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras. Después de unos instantes, aparentemente decidió rendirse.
-Está bien, Corisande. Respeto enormemente tu discreción. Si me dices que lo que muestra el boggart del señor Potter no representa una amenaza inminente para él, entonces confío en ti.
“A propósito, acabo de recibir una botella de hidromiel de Rosmerta. ¿Quieres tomar una copita?
Más relajada, Corisande aceptó. Servilia se puso de pie, se dio vuelta hacia la mesita que había detrás de su escritorio y sacó la botella. Mientras tanto, Corisande miró atentamente a los retratos de los directores que colgaban de las paredes. Severus Snape observaba la entrevista con mucha atención, lo mismo que Phineas Nigellus Black. Albus Dumbledore, por su parte, dormía profundamente. Minerva McGonagall leía uno de los muchos libros con los que la habían retratado. Los demás directores no parecían muy interesados en la charla.
Finalmente Servilia le ofreció una copa de hidromiel, tomó asiento y levantó la suya.
-Por Hogwarts y Beauxbatons.
-Por Hogwarts y Beauxbatons -repitió Corisande, y bebió un sorbo del delicioso líquido.
Crouch también bebió un trago de hidromiel, y levantó los ojos soñadoramente hacia el techo.
-La docencia… Muchos creerán que ser una Auror y ser una profesora son dos trabajos muy distintos, pero yo he pasado unos diez años en un trabajo y veinte años en el otro, y puedo decir que se parecen. La única diferencia es que al lidiar con niños y adolescentes corres un riesgo de morir un poco menor que al ocuparse de magos oscuros -dijo con una sonrisa irónica. Luego dirigió su mirada nuevamente al rostro de Corisande, y cuando vio la expresión ausente en sus ojos, preguntó con tono casual:- ¿Qué vio Potter cuando luchó con el boggart?
-El boggart -dijo Corisande, mecánicamente- se dividió en dos. Una mitad se convirtió en el propio Albus, y la otra en su amigo Scorpius Malfoy. El falso Albus y el falso Scorpius se abrazaron, y el falso Scorpius lo apuñaló por la espalda y continuó clavándole el cuchillo una y otra vez.
-¿Potter logró vencerlo con el Riddikulus?
-No, cada vez que lo hacía el boggart cambiaba la escena a otra persona apuñalando a Albus. Primero fue Rose Weasley, luego fue Livius Black y por último fue su padre. Fue en ese momento que decidí sacarlo del salón.
Servilia Crouch había sido profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras durante unos diecisiete años, de modo que tenía la suficiente experiencia como para llegar a la misma conclusión a la que Corisande había llegado unas horas antes sobre a qué le tenía miedo Albus.
-Esto es muy, muy interesante. Bueno, Corisande, te agradezco por la información que me diste. Lamento habértela tenido que arrancar mediante la poción Veritaserum, pero era necesario. Pero no te preocupes, pronto no recordarás haber roto involuntariamente la promesa que le hiciste a Potter. ¡Obliviate!
waw!
la de los falso albus falso scorpius me dejó lelo
apuñalada y apuñalada!
waw!
para que vean que Hogwarts dejo de ser zoológico creo?
Depende de lo que entendamos por “zoológico”, Dinorider. Sin duda hay unos cuantos lobos, como la directora…
Un abrazo
quiero decir que en serio te esfuerzas en tu blog
wow excelente capitulo… dure toda la mañana leyendolo… y servilla debe ser mala…
Muy bueno lo de tenerle miedo a la traición! Y esa Crouch que no me cae hasta ahora xDDD. Jajaja, buen chap =)
mmm… sin palabras buen cap pero corisande para ser profesora de defensa contra las artes oscuras no es muy astura!!!! deberias ser como moody de seguro el no se hubiera tomado eso!!!
Es que Corisande es joven y creció en Francia, donde la guerra contra los Mortífagos apenas debe haberse sentido. Quizá si le hubiese tocado crecer en Gran Bretaña ella habría sido un poco menos confianzuda.
Q directora tan HDP
me gusto el capitulo,
Definitivamente Servilia Crouch es mala y traicionera
pero que sabe exactamente de la profesia?
No sabe nada, solamente le ordenaron vigilar a los Potter. El único que la conoce entera es, por ahora, Kingsley.
Saludos y gracias por los comentarios
ok gracias
holaaaa.! e leido todos los capitulos pero este es el primero en el que dejo un comentario.!
la verdad es que quisiera saber realmente porque la directora hace esas cosas . realmente pareciera que estubiera actuando bajo una maldicion imperdonable.! no creo que el ministro le obligue a hacer todo ese tipo de cosas .!
bueno
espero la respuesTA
BYE
Crouch hace todo lo que hace por voluntad propia. Kingsley solamente le ordenó vigilar a los Potter, pero no le dijo que usase medios como la Veritaserum y el Obliviate para conseguir información. Pero Crouch es muy inescrupulosa y cree que si satisface en todo al ministro podría ser su sucesora.
Saludos
rayos calientes!! q mujer esa crouch!! q habria pensado moody de corisande?? casi lo oigo. primero: «crouch se rindio muy facilmente, debio haberlo previsto. ALERTA PERMANENTE!» segundo:»era hidromiel, pudo embriagarla y sacarle informacion. ALERTA PERMANENTE!» tercero: «VERITASERUM! ALERTA PERMANENTE!»
Oh dios pero que mujer tan irritante, me parecio muy mal lo que hizo con la porfesora Corisande, hablando de ella esa profesora es soñada me encantaria tener una como ella, y me recuerda mucho al profesor Lupin. Y excelente lo del boggart, Martin. Y me muy mala espina que Albus le tenga miedo a la traicion tine muchos pensamientos de un mago oscuro y eso no me gusta.
buenas?? me encanta como escribes, solo cosas:
-como es q esta minerva en el despacho de la directora??esta muerta?
-como s q n su primer dia, la profesora corisande sabe ya los nombres de rose, albus, escorpius y algun otro?
-aora es neville el subdirector ade+ del jefe d la casa d gryffindor??
weno y aora a seguir leyendo
1. Minerva no está muerta, simplemente se jubiló. No creo que sea necesario que el director muera para que su retrato aparezca en la oficina.
2. Supongo que Corisande tiene buena memoria para los nombres (en eso se diferencia de mí totalmente).
3. Sí, Neville ostenta los cargos de vicedirector del colegio, jefe de Gryffindor y profesor de Herbología.
Saludos!
ya sabia yo que por algo se apellidaba crounch.. digna hermana de su hermano que es…. y esta maestra de DCAO tan confiada!! desde que le ofrecio el hidromiel me dio mala espina, como cuando umbridge le ofrecio el te a harry…
la pelea entre los boggars albus-scorpius fue alucinante, olvida mi comentario anterior sobre la teoria… ya quede satisfecha.. ejej
bueno martin, te cuidas mucho, seguire leyendo.. bye
gracias x la aclaracion
pensaba q los retratos solo aparecian cuando moria el director
que horror
pobre albus, es horrible que te traicionen.
no me gusto que la directora haya echo eso… grrr
eso no se hace si la profesora le prometio a albus que no diria nada por mas que estubiera en peligro no me parece que hacer eso haya estado bien.
me cae mal la dierctora ahora.
eso
esta muuuuuy genial tu fic y escribes genial
^^
sayonara
Discupla si me equivocó pero no pusiste en un comentario del capítulo anterior que este se iba a llamar ¿Godric?, bueno solo era la duda.
Bueno, ese capítulo se retrasó un poco, pero está, no te preocupes.
Saludos
me encanta lo descriptivo q eres, esto ayuda a desarrollar mas la imaginacion, y tambien nos da una idea mas exacta de lo que pasa.
q falsa!! q horror para mi que la Crouch esa es mala. ggrrrrr q askerosaa!!
oye… el harry potter y el prisionero de askaban, muestran que un boggart ataca a harry, y aqui dicen que no atacan, como es eso???
algo que no me quedo claro… ¿de que crouch es hermano servilia?¿de crouch padre o hijo?
anonimus… el boggart en el libro 3 no lo ataca… el se desmaya… o por lo menos creo que es asi…
Servilia es hermana de Barty Crouch padre.
sin palabras
estuvo genial
fabuloso
sigue asi
esta genial lo que haces, pero no me gusta mucho el hecho de que jame y albus tengan la capa y el mapa del merodeador, porque harry es auror y su trabajo es peligroso y pues me parece obvio que el la necesita mas y porque no creo que harry quisiera que sus hijos merodearan por el castillo buscando problemas
No necesita el Mapa porque dudo mucho que en su trabajo como Auror él tenga que ir muchas veces a Hogwarts, y no necesita la Capa porque debe ya ser perfectamente capaz de hacerse un Encantamiento Desilusionador.
Hola, muy bueno todo lo que escribes, me gusta mucho, ya me han contado que se pone mejor cada capitulo, felicidades.
Con respecto al boggart, anonimus y juan porta, el boggart no ataco a harry y este tampoco se desmyo, Lupin lo quito de enfrente porque penso que se convertiria en Voldemort
Hasta me espantas!!! me dejo eso con la boca abierta, valla es lo mismo que temo yo pero creo que eso me frustaria… lo sigo diciendo, muy buen fic
no se,tal vez no sea nada,pero estoy casi segura de k servilia o como se llame la directora no es de muy buena calañA.
Buen capitulo, pero no creo que el retrato de Mcgonagall deba estar ahi, imagino que debe morir para aparecer ahi. Imaginate que Mcgonagall entre al despacho del director (por cualquier situacion) podria hablar consigo misma?
Creo que el chiste de los retratos de los directores es que cuando mueres parte de tu conocimiento va al retrato, y creo que no lo pinta alguien, aparecen magicamente. Como paso cuando Dumbledore murio.
Bueeeeenooooo son solo suposiciones.
De todas formas me guasta la historia, las puñaladas estubieron fuertes y entretenidas XD.
Me cae mal la directora, creo que es por el concepto que me dejo dumbledore de como debe ser un director.
Seguire leyendo y haber que pasa
pobre abus!
miedo a la traicion
q horror
buen cap martin
beso
wowwwwwwww esta muuuuuy muuuuuy bkan este capitulo deje todo lo q hacia x un rato xq me transporte repentinamente al aula de DCAO y la directora d verdad q no le imxta lo q tenga q hacer para conseguir lo que quiere pobresitos los q se crucen en su camino
pero corisande debe ser lo bastante astuta como para no caer en una trampa tan idiota. ademas se supone que se enfrento a la magia oscura y sus inacabables tretas
Eso mismo pensé. No es apropiado desconfiar de la directora, vd? que tipo de mundo es uno en que debes contar con que la directora te de a beber veritaserum para que rompas una promesa a un alumno?
Sin embargo, la frase, justo entonces, no podía ser más obvia. Se la hubiera dado… no sé, antes, o después.
aaaaaa entonces para servilia definitivamente «el fin justifica los medios»… no me parece… tiene una doble personalidad x decirlo asi… dijo q respetaba la decision pero luego c le hizo romper la promesa con albus :(:(:(:(:(:(:(
= voy a seguir leyendo pa ver q pasa
gracias x ese fanfic… muy bueno
muy buen relato apasionante y muy bien redactado
eso me da dolor.
pobrecito albus miedo a la traicion… soy yop y salgo corriendo como gritando me van a matar… pero hablando en serio ☺ es muy buen cap.
byeeee.
love danny
McGonagall está muerta. Duda aclarada.
¿Cuándo se dice eso?
Oops! yo tambien la di por muerta, por lo del cuadro. todos los directores de los cuadros estan muertos, tal vez por eso uno tiende a pensarlo. pero ahora pensando en el capitulo de Harry en la calle Hilandera, es Severus del cuadro se extraño que fuese Harry y no el que lo fue a buscar. aunque muy vieja, Minerva puede estar viva 🙂
exelente final!! me hizo decir «HDP!» jajaja! esa Crouch no me cayó desde el principio. nsoe porque, pero se me hacía una imagen de Umbridge cuando la imaginaba. jaja aca esta la evidencia! me gusta como calculas todo, pocas cosas se te escapan. felicitaciones! 🙂
y otro dato que estaba esperando hace rato! la capa esta en Hogwarts tambien!! :O las 3 Reliquias en Hogwarts!!
Es cierto! Que facil que lo tendrá para reunirlas. Y siendo un hijo de Harry, también lo pueden buscar los problemas, ya me imagino que ni siquiera necesita buscarlas, llegarán a él…
Sí. Lo supe desde que mencionó la botella de hidromiel!!! Ya me cae mal esa directora. n_n
El mayor temor de Albus, ¡Me encanta!
woow esa directora
no me dio buena espina
desde el principio
es una mala bruja!!!
amo esos fanfics
¡ME QUEDÉ PASMADÍSIMO CON EL BOGGART DE ALBUS Y LA MANIPULACIÓN DE SERVILIA!
Aunque fue bastante cruda la escena, me pareció insólito e intrigante ver a Albus masacrado por Scorpius, Rose, Livius y… ¡POR SU PROPIO PADRE!
Y para más intriga, me sorprende ver de lo que es capaz Servilia para conseguir lo que quiere..
Ahora la pregunta es… ¿será crucial que Servilia sepa cuál es el mayor temor de Albus? ¿Llegará el momento en que le sea útil esa información? ¡Ya no aguanto las ganas por saber más!
WOW!
Debo decirte que estoy más que impresionada, absorta, fascinada y «picada» con tu fic…
Una amiga me dijo hace unos dias de tu historia ( y que te sigue desde el 2007 x cierto) Aún cuando no suelo leer fics que no estén terminados, me llamó en cuanto me dieron una descripción. No encuentro más palabras para describir lo mucho que me gusta y no puedo omitir felicitarte por una redacción tan buena (y tan poco común). La sobriedad e imparcialidad para los personajes, los detalles de la historia.., en verdad, WOW! No me queda más que felicitarte, y agradecerte por el tiempo invertido que nos permite gozar a los lectores. Estoy ansiosa en seguir leyendo.
Saludos y un abrazo muy fuerte desde México!!
WOW! Que impacto!!! Este es el mejor capítulo hasta ahora, junto con el de «La Primera Vez de Albus» y alguno q otro de «El Otro Pensadero» (aunq al principio no me cayó bien la noticia de la homosexualidad de Dumbledore). CHAMO! EXCELSOOOO! Una J.K.ROWLING en potencia!!!